"El Papa es el representante del Maligno en la tierra"

 


Milei dijo en un programa de TV: “Este país tiene tantos años de justicia social… ¿Qué es la justicia social? Es la envidia, el odio, el resentimiento. A ver, originalmente, la envidia era un pecado capital. Habría que informarle al imbécil ese que está en Roma, ¿sí?, que defiende la justicia social, que sepa que es un robo y que eso va contra los mandamientos. Que la envidia —que es la base de la justicia social—, digamos, es un pecado capital, y que por más que lo disfraces con un nombre lindo, ‘justicia social’ es una aberración." El presidente confunde envidia con derechos. La justicia social no es querer quitarle al rico, sino garantizar que el pobre no muera en la miseria. Decir que es "robo" ignora que: La desigualdad extrema sí es un robo histórico: ¿O acaso las grandes fortunas no se construyeron sobre tierras usurpadas a pueblos originarios, salarios miserables o privilegios fiscales? Ejemplo: En Argentina, el 1% más rico concentra el 31% de la riqueza (Credit Suisse). Los mandamientos no defienden la acumulación obscena: Jesús expulsó a los mercaderes del templo y dijo "es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja que un rico entre al Reino de los Cielos" (Mateo 19:24). Francisco no habla desde la "envidia", sino desde la doctrina social de la Iglesia: Encíclicas como Fratelli Tutti denuncian que el mercado sin ética crea "descarte de seres humanos". La Iglesia medieval cometió errores, pero hoy llama a "globalizar la solidaridad" (no el odio). "Cuando un político llama 'envidiosos' a los que piden pan, en realidad teme que descubran que su riqueza viene del hambre de niños desnutridos y de poblaciones en viviendo en la miseria".: deshumanizarnos para justificar la desigualdad es una acto de crueldad y cinismo. "Envidioso" es el clásico recurso de quien no quiere debatir: si te niegas a aceptar que un niño muera por desnutrición mientras unos pocos acumulan fortunas, el problema no es tu "envidia", sino su cinismo. La justicia social no es odio: es amor con dignidad ¿Acaso es envidia exigir que un anciano tenga una pensión digna? ¿Es resentimiento pedir que los niños pobres accedan a la misma educación que los ricos? No. Es humanidad. La verdadera violencia es naturalizar un sistema donde unos nacen con todo y otros con nada. Los poderosos prefieren un mundo donde los oprimidos no alcen la voz. Nos dicen: "No sean violentos", pero...¿Dónde está su condena a la violencia de un salario que no alcanza? ¿Dónde está su indignación cuando un hospital público se cae a pedazos? Cada vez que defiendes derechos, siembras paz.: Los que hoy te llaman "kuka" son los mismos que ayer llamaban "subversivo" a quien pedía escuelas y pan. "No nos confundan: no odiamos a los ricos; amamos tanto la vida que no aceptamos que nadie sobreviva en la miseria. Nuestra lucha no es por la riqueza o el lujo, sino para que la dignidad no sea un privilegio de unos pocos."


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