Recuperación de la Rural
Que no hubiese vendido Menen si le ofrecieran un dinero. Así pasó con tantas empresas del estado, como Aerolíneas Argentinas, Ferrocarriles, YPF, astilleros y siderurgias, canales de tv y radio, etc. Privatizar es fácil, hacerlo andar, ahí está el mérito ¡Argentina levántate y camina! pero déjenla caminar. Lo mismo que el predio de la sociedad rural, que lo regaló por 30 millones de dólares, un valor que estuvo por debajo del 50 por ciento del precio real en ese momento, lo que la justicia considera un precio vil. La cámara patronal había acordado un pago de 10 millones de dólares en efectivo y luego una financiación a 10 años, donde pagaría dos millones de dólares por año. En 2001, luego de la crisis económica tras la caída del gobierno de la Alianza, la SRA dejó de pagar. Tras la cautelar de la Cámara Civil y Comercial que impidió su recuperación, el ministro de Justicia, Julio Alak, dijo: "convalida una situación irregular, porque a cualquier hijo de vecino que no paga las cuotas lo ejecutan, le sacan la casa, el auto o lo que fuere, y a la Sociedad Rural no". Como decía Fierro: "La ley es como la telaraña: atrapa a los bichos chicos y deja pasar los grandes". Los ruralistas no quieren que un predio perteneciente al patrimonio nacional vuelva a su antiguo dueño, el pueblo, el que se haría más prospero, de lo contrario lo hace solo un pequeño sector, acostumbrado a tener mucho e importarle poco la suerte del resto de la población. La Cámara Nacional de Apelación en lo Civil y Comercial volvió a fallar en contra del Estado; habilitó la feria judicial y le concedió a la Sociedad Rural una medida cautelar que frenó la recuperación del predio ferial de Palermo por parte del Estado nacional. Una vez más el pueblo debe entender que quizá a el gobierno le preocupe poco la suerte que pueda correr su pueblo, pero que una empresa privada, de capitales multinacionales le importe, es inverosímil, es más le es indiferente, mientras ganen más al menor costo, que pase lo que pase, total lo justifican con la frase de si sucede conviene. El pueblo debe saber de qué lado está y quien es el que le da de comer. Lo que está en juego es la soberanía Nacional; oponerse a esta medida es poner a la oligarquía por sobre la república, la fuerza por sobre la razón y los ciudadanos queremos creer que todos somos iguales ante la ley, que los pactos están para ser cumplidos y que nuestros representantes nos representan.
Comentarios
Publicar un comentario