Mercenarios
En términos energéticos la guerra es un despilfarro de energía, aunque la energía no se pierde, se transforma, pero convertirla en polvo es perder otras opciones que nos podrían haber llevado a una vida mejor. Irak, Afganistán, Libia, se han vuelto colonias de países industrializados que necesitan mucho petróleo para no disminuir la calidad de sus vidas, los que pueden pagar sueldos de medio millón de dólares a la nueva jefa del FMI, a los que todavía el calentamiento global les representa un negocio, los que gozan de casi todas las garantías constitucionales, pero no consideran dignos a los pobres de la periferia; que por tener gobiernos corruptos o despóticos, sus niños no pueden llegar a la universidad. Los países opulentos saben que lo que están haciendo está mal, por eso están retirando sus ejércitos que han entrenado para la defensa de su soberanía no para el saqueo, entonces contratan a Mercenarios, que por un par de dólares arriesgan sus vidas, no tienen problema para poner precio a sus cabezas y a la de los demás. Países ricos que han aprendido a serlo subyugando a otros desde los tiempos de la esclavitud, ahora es con armas o con bancos, convirtiendo así al ser humano en una bestia de carga, reduciendo así la condición tanto de los que someten como de los sometidos, porque lo que hacemos a los demás termina salpicando nuestra esencia.
Comentarios
Publicar un comentario