GOLPE DE ESTADO EN HONDURAS II

Hay que abrir bien los ojos, el golpe de Estado levantado en Honduras es una prueba a nuestras jóvenes e inmaduras democracias, instituciones y reacciones. No podemos caer en el relativismo a la hora de analizar el derrocamiento de un gobierno legal y legítimo por otro traído con la fuerza y el capricho. Los pueblos necesitan de derechos y garantías cada vez mas consolidados, pero si cada vez que interrumpimos la costumbre a la vida cívica con personajes mesiánicos, que dicen ser los salvadores, que por ver afectados sus intereses económicos recurren a la violencia para imponer el peso de su egocéntrica voluntad, aquellos hábitos que forman a los ciudadanos libre e iguales se pierden, involucionando en primitivismos sistemas de castas, los que solo saben de guerra, donde el mas fuerte determina lo que es ley. La indiferencia de muchos no debe tildar nuestro asombro, porque no son capaces de ver los pasos de historia y de comprender de que solo tenemos futuro si no perdemos la memoria. La gripe porcina nos debe preocupar puesto que el virus es muy contagioso y causa muchas bajas. Pero un golpe de estado, una dictadura en Latinoamérica nos debe preocupar mucho más porque también es como una especie de virus contagioso que causa bajas y que si no es controlado en un principio se puede transformar en un pandemia política. La Constitución Nacional, los Tratados Internacionales son cosas sagradas de los pueblos y todos aquellos que violen los mecanismo mas pensados para lograr la armonía deben ser considerados como infames traidores de la patria; si perseguimos a los delincuentes para que no vuelvan a reincidir lo mismo debemos hacer con los que quieren conseguir algo agitando una pistola.

Pablo Martín Gallero

Comentarios

Entradas populares de este blog

Efecto Hawthorne

Comer, coger y dormir

Todo preso es político...